No obstante el cariño y las atenciones de sus amos, algunos perros no se encuentran equilibrados mentalmente, condición que se ve reflejada en malos comportamientos, tales como orinar dentro del hogar y agresiones hacia otros perros o incluso hacia sus amos.
Tonatiuh Villalpando desde hace 26 años se desempeña como entrenador canino. Ha aprendido que para los animales es de suma importancia tener una figura de jerarquía, que los guíe y les imponga reglas.
En la actualidad, señala el entrenador, el principal problema es que los amos han humanizado a las mascotas y han dejado de ponerles límites, lo que lleva al animal a creer que él es líder.
“Cuando ellos se sienten el líder es cuando vienen los problemas, el perro le pierde el respeto al dueño y lo llega a agredir, entonces lo primero es ver qué perfil tiene el perro, porqué reacciona así, por jerarquía, por nerviosismo, así como conocer el perfil de familia para después trabajar con los ejemplares”, explica el entrenador, tras destacar que la labor de adiestramiento comienza desde el momento en que salen los animales de casa.
Sin embargo, considera que lo más complejo es el trabajo con los dueños de los canes, ya que vuelven a consentir en exceso a los ejemplares tras su entrenamiento.
“Por lo regular yo entrego perros en obediencia y les doy un respiro a los ejemplares; me paro unos meses después en el domicilio para ver cómo van y el clásico comentario es que no hacen caso, pero en cuanto el perro me ve empieza a trabajar su obediencia”, apunta.
Y si bien las mascotas son consideradas miembros de la familia, sus dueños deben entender que son diferentes a ellos y que para sentirse en armonía, los canes requieren ejercicio diario, paseos, sociabilizar con otros perros y personas, así como proteger a sus amos y recibir amor expresado en caricias; simplemente necesitan ser lo que son: perros.
Con información de Notimex
