Periodismo imprescindible Viernes 29 de Marzo 2024

Receta para arruinar a una personita

Las habitaciones de algunos niños o niñas parecen auténticas jugueterías. Tienen más juguetes de los que necesitan y, debido a su corta edad, no dimensionan el valor real de cada uno de ellos. Incluso, para muchos, recibir el último modelo de un juguete que ya tienen (como una consola de videojuegos o un celular) o el juguete de moda se convierte en casi una obligación que sus progenitores deben satisfacer, más que en una muestra de afecto. ¿Cómo puede suceder eso?
31 de Diciembre 2017
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 Lo que cualquier padre o madre desea para sus hijos es que sean dependientes de algo, que tengan una sensación permanente de vacío emocional y que, por supuesto, ese algo los ayude a aligerar sus complejos e inseguridades. La receta es sencilla: llénelo de regalos –no se limite–, dele todo lo que desee, de preferencia, durante cualquier momento del año. Así, antes de que el niño o niña termine la adolescencia, lo habrá conseguido.

Las habitaciones de algunos niños o niñas parecen auténticas jugueterías. Tienen más juguetes de los que necesitan y, debido a su corta edad, no dimensionan el valor real de cada uno de ellos. Incluso, para muchos, recibir el último modelo de un juguete que ya tienen (como una consola de videojuegos o un celular) o el juguete de moda se convierte en casi una obligación que sus progenitores deben satisfacer, más que en una muestra de afecto. ¿Cómo puede suceder eso?

De acuerdo con Mariana Gutiérrez Lara, investigadora de la Facultad de Psicología de la UNAM, especializada en infancia y juventud, lo que los adultos regalan a los niños y niñas tiene más que ver con sus propias carencias infantiles y complejos que con los deseos de los pequeños.

Por ejemplo, unos padres ausentes, ya sea por el tiempo que trabajan o por dinámicas familiares, buscarán sustituir su ausencia mediante regalos, lo cual, lejos de aliviar el vacío, manda un mensaje negativo: lo que importa son las cosas, no las personas.

Otro ejemplo: si el padre tuvo carencias durante su niñez, querrá satisfacer esas mismas carencias mediante regalos excesivos para sus hijos o, deseará refrendar su estatus frente a otros padres, también a través de los obsequios.

Un niño no necesita el último modelo de todo ni decenas de juguetes. Al final, cuando sea adulto, no recordará ni el 10 % de los juguetes que tuvo. Es decir, recordará de cuando su papá o su mamá le enseñó a andar en bici sin rueditas, pero no recordará al detalle cómo era la bicicleta”, dice la especialista.

Respecto al mercado del juguete, las cifras no son cosa de juego: 2 000 millones de dólares de ventas cada año y casi 11 000 fuentes de empleo genera la industria, según la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete.

Es decir, un gasto promedio de 1 218 pesos por cada uno de los 32 millones de niñas y niños mexicanos. Sin embargo, debido a la desigualdad social, la mayor parte de este gasto va dirigido apenas a una tercera parte de la población infantil.

México es uno de los países donde el consumo de juguetes se ha disparado en los últimos años. Según la Constanza Business & Protocol School, de España, “los países en los que más ha crecido el gasto en juguetes desde 2010 son economías emergentes, Brasil (142 % de incremento), India (76 %), Rusia (68 %), México (65 %) y China (49%)”.

Reyes y Santa, compradores compulsivos

Siete de cada 10 juguetes que se compran en México se obtienen en la época navideña. Los Reyes Magos gastan, en promedio, entre 1 200 y 5 500 pesos por niño, según la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope). Es decir, entre 13.6 y 62.2 días de salario mínimo.

En Inglaterra, un grupo de mamás blogueras lanzó la “Regla de los cuatro regalos”, que cobró auge a finales de 2016. La “regla” consiste en obsequiar algo que necesite, algo que quiera, algo que ponerse y algo que leer.

Según Gutiérrez Lara, no existe un número ideal de obsequios que dar a los niños y niñas: “Cada padre debe pensar en el “para qué”. Cada regalo, cada juguete debe tener un propósito. Si es teléfono celular para que el niño se comunique, no precisa que sea el modelo más caro”.

Sobrerregalar presentes a los niños puede volverlos insensibles y apáticos, incapaces de apreciar el valor material y emocional de cada obsequio.

Me gustaría que cuando un padre escoja un juguete, escogiera uno que pueda jugar con su hijo. Si juegan a la lotería con su hijo, por ejemplo, el niño aprende muchas cosas: desde la toma de turnos, negociar, hacer cuentas, concentración, qué pasa cuando hacen trampa, cuando pierden. El juego es el momento ideal para poderme relacionar con él”, dice Gutiérrez Lara.

Claudia K. Montoya, especialista en educación inicial, describe en su artículo “Por qué juegan los niños”, que los juegos y los juguetes cumplen una función fundamental: estimular la actividad, la iniciativa y la expresión de los niños, y ayudan a que practiquen nuevas habilidades adquiridas.

Sin embargo, por lo general, los niños solicitan los juguetes que aparecen en mayor número de spots publicitarios; toca a los adultos, entonces, elegir los idóneos para cada momento del desarrollo.

No todo tiene que ser material

La cultura consumista en la que vivimos como sociedad ha limitado la mirilla para detectar regalos únicos. Cuando se refiere a niños, pensamos en automático en juguetes; quizá esa sea la salida fácil, pero dejamos de lado las experiencias, por ejemplo: un viaje, un pase anual para un parque de atracciones, boletos para un evento (concierto, partido de futbol, teatro, que quizá de todas formas se les comprarían sin razón alguna), clases a algún curso de su interés, o algún artículo que lo lleve a vivir experiencias o desarrollar habilidades, como un instrumento musical o equipo para un deporte o actividad (como campismo).

Necesitamos recordar que jugar con los hijos es la mejor manera de relacionarnos con ellos, y que nuestra ventana de oportunidad para aprovechar esta herramienta tiene fecha de caducidad”, dice Gutiérrez Lara.

Recuadro

Los juegos que más juegan los niños en México

Juego

Niños

Niñas

Deportes (futbol, basquetbol, voleibol, etc.)

96.2 %

77.0 %

Videojuegos

93.8 %

67.0 %

Bicicleta, patines, patineta, etc.

91.8 %

92.6 %

Juegos de mesa

89.7 %

91.7 %

Escondidas, quemados, luchas, policías y ladrones, etc.

85.8 %

92.0 %

Canicas

80.9 %

44.8 %

Juegos de parque (columpio, resbaladilla, etc.)

77.2 %

91.0 %

Cochecitos

72.4 %

2.6 %

Muñeco (as)

68.4 %

80.9 %

Roles (ser mamá, doctor, maestra, superhéroe)

52.9%

75.2%

Juegos de manos (marinero, manitas calientes, etc.)

49.4 %

84.7 %

La comidita

5.9 %

68.3 %

Fuente: Encuesta ¿Cómo se divierten los niños?, Profeco, 2005.

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