Periodismo imprescindible Viernes 29 de Marzo 2024

Bullying financiero

20 de Mayo 2018
RICARDOCHAVERO
RICARDOCHAVERO

Dicen que dinero y relaciones no se mezclan muy bien. Tal vez no puede comprar el amor, como diría el cuarteto de Liverpool, ni la felicidad, pero tiene algo que ciertamente puede crear tensión en cualquier hogar. El dinero es un tabú en nuestra cultura y entre las parejas también. Muchos de mis clientes se sorprenden cuando escuchan por primera vez el sueldo de su pareja –matrimonios que llevan más de una o dos décadas juntos– o las famosas infidelidades financieras en las que se hacen compras de ropa a escondidas o se adquiere el videojuego de moda. Cerca del 85 % de los divorcios en nuestro país ocurren por problemas financieros. Hay otras parejas que no se permiten comprar si no están juntos; otras no le permiten tener tarjeta de crédito a su contraparte, y en otro grupo están los que tienen que rendir cuentas a la pareja mostrando tickets y recibos de  sus compras.

Podemos ver cómo todos estos factores se conjuntan en una traición. Un estudio realizado en los Estados Unidos dice que cerca del 60 % de la población cree que una infidelidad financiera es tan destructiva como una infidelidad sexual. El 45 % de las parejas dice que hablar sobre el dinero lleva a discusiones. 30 % declara que es lo que causa más estrés en la relación. 91 % encuentra razones para evitar pláticas de dinero con los padres. Lo que no nos ponemos a pensar es que revisar los gastos de la pareja, humillar o pedir recibos de los gastos es bullying financiero. No sólo implica hacer sentir mal a la pareja por sus hábitos de compra, tiene que ver también con una cultura de control dentro de la relación. Lo interesante es que en México está claramente marcado por un sexismo y una falta de conocimiento financiero de ambos géneros.

En cuestión de analfabetismo financiero tenemos equidad de género. Los mexicanos administramos muy mal nuestras finanzas, y además tenemos el hábito de culpar a nuestra pareja por cualquier falla en nuestro gasto. Los comportamientos tradicionales de un bully financiero consisten en controlar de manera estricta las tarjetas, dar una cantidad determinada y esperar que resuelva el presupuesto de la casa sin nunca haberse sentado a revisar gasto por gasto. Asimismo te hace menos por el sueldo que gana en comparación al tuyo y lo que aportas al hogar. Trata de buscar que no ganes más que él o ella.

Hay muchos estudios donde se señala que el bully evita que las mujeres inicien un negocio o busquen crecer profesionalmente con algún diplomado o maestría; te demanda que entregues tus salario para administrarlo, te da un sueldo fijo de tus propios ingresos; controla las metas financieras de la pareja. Es importante preguntarse que tan grave es esa intimidación y sentarse a platicar sobre temas de dinero. Igual que en terapia de parejas, lo importante es tener un tercero que sea un especialista en el tema y pueda recomendar primero cómo administrar el dinero y dé un seguimiento a las finanzas de la pareja.

También es muy relevante hablar de los sentimientos y cómo afecta el dinero la estabilidad de la pareja, así como cambiar los roles a fin de entender cuál es la visión del otro. Si eres el que está haciendo el bullying, recuerda que eventualmente lastimará a la pareja y la relación, y por lo mismo el costo será muy alto. Es mejor tener finanzas sanas y aprender sobre el tema.

*Asesor financiero especializado en fintech y coaching financiero.

@networthmx

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