Por Jack Stubbs y Paul Sandle
LONDRES, 28 ene (Reuters) – El primer ministro Boris Johnson determinará el martes si la gigante china Huawei debe tener un papel en la futura red de telefonía móvil 5G de Reino Unido, una decisión con la que corre el riesgo de deteriorar las relaciones con Estados Unidos o China en vísperas del Brexit.
Johnson presidirá una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en la que se hará una recomendación sobre el papel de Huawei, en lo que supone la mayor prueba de su política exterior post-Brexit hasta la fecha.
La decisión deleitará o consternará a una de las dos economías más grandes del mundo: la administración del presidente estadounidense Donald Trump teme que China pueda utilizar a Huawei para robar secretos occidentales, mientras que Pekín ha advertido que el bloqueo a la compañía afectaría a las inversiones chinas.
Johnson dijo el lunes que era posible contar con la nueva tecnología 5G sin comprometer la seguridad nacional o la estrecha relación de los servicios de inteligencia de Reino Unido y Estados Unidos.
“Vamos a encontrar una solución que nos permita alcanzar ambos objetivos”, dijo en respuesta a la pregunta de un reportero sobre Huawei.
Huawei, el mayor fabricante mundial de equipos de telecomunicaciones, dice que Estados Unidos tiene interés en que se le bloquee el acceso a la red británica de 5G porque ninguna empresa estadounidense puede ofrecer la misma gama de tecnología a un precio competitivo.
El 5G es una de las mayores innovaciones desde el nacimiento de internet hace una generación, ofreciendo a los consumidores y a las empresas velocidades de datos mucho más rápidas.
Las dos potencias mundiales se han enfrentado en una contienda que algunos comparan a la carrera armamentista de la Guerra Fría. A Estados Unidos le preocupa que el dominio del 5G dé a China acceso privilegiado a las redes de comunicaciones mundiales, dándole una ventaja incuestionable en materia de tecnología y seguridad.
Fuentes consultadas por Reuters la semana pasada dijeron que las autoridades británicas habían propuesto otorgar a Huawei un papel limitado en la red 5G. Se trataría de un “compromiso calculado” que podría presentarse a Washington como una dura restricción, pero que también sería aceptado por operadores británicos que ya utilizan la tecnología de la empresa.
Los equipos de Huawei ya son utilizados por las mayores empresas de telecomunicaciones británicas como BT y Vodafone, pero la tecnología china se ha desplegado en gran medida en la periferia o “borde” de la red, quedando excluida del “núcleo” donde se procesan los datos.
Estados Unidos ha argumentado que a medida que la tecnología 5G vaya evolucionando, la distinción entre el “borde” y el “núcleo” se irá difuminando conforme se procesen los datos en toda la red, lo que hará difícil contener cualquier riesgo de seguridad.
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(Reportes de Jack Stubbs, Luke Baker, Kylie MacLellan y Paul Sandle. Editado en español por Marion Giraldo y Tomás Cobos)
