¿Entre tus propósitos incluiste un ajuste a tus finanzas personales? Es muy probable que no. En este sentido, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) lanzó una serie de recomendaciones que te pueden ayudar no sólo durante la cuesta de enero, sino durante el resto del año.
Un primer propósito financiero sería eliminar tus deudas, ante lo cual debes hacer un esfuerzo por liquidarlas, así como estar al corriente en los pagos de tarjetas de crédito para disminuir el interés que generan.
En tanto, a fin de multiplicar el dinero que tengas ahorrado podrías invertir, y uno de los instrumentos apropiados serían los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes). Puedes iniciar con 100 pesos. Cabe señalar que el rendimiento que ofrecen es cercano a la inflación, lo que significa que el dinero no pierde valor.
Otro de punto sería reestructurar tus deudas, es decir, negociar acuerdos con la institución financiera a la que le debas, esto para liquidarlas lo más pronto posible y evitar el sobreendeudamiento.
La Condusef refiere que es importante fijarse el objetivo de depositar en la cuenta de la Afore, debido a que el ahorro voluntario incrementa de manera considerable la pensión, permite una mayor ganancia y es deducible de impuestos.
La contratación de un seguro de gastos médicos mayores, de vida, de auto o de casa es otra buena determinación, ya que son instrumentos financieros con los que podrías reducir los gastos en caso de enfermedad, accidente o imprevistos.
Planear las compras con anticipación, crear un presupuesto y no salirse de él; evitar las adquisiciones por impulso y recortar los “gastos hormiga” son excelentes objetivos en las finanzas personales sanas, pues estas fugas de dinero causan desequilibrios en el bolsillo, además de crear el buen hábito del ahorro, administrar los recursos y reflexionar sobre los artículos que adquieras considerando si son necesarios o sólo son gustos temporales.
