BRUMADINHO, Brasil (AP) — Los brasileños se reunían el viernes para recordar a las 110 víctimas que murieron y las 238 que siguen desaparecidas después de que se desplomara la presa de una mina hace una semana.
La ceremonia en el estado de Minas Gerais inició alrededor de las 12:50 de la tarde.
Un sacerdote acompañó a los bomberos mientras colocaban altas cruces de madera en el sitio y los familiares de las víctimas dejaban fotografías y objetos pertenecientes a sus seres queridos. Desde helicópteros se soltaron pétalos de rosas sobre la mina de mineral de hierro.
Las autoridades siguen las operaciones de búsqueda de sobrevivientes y cadáveres. Nadie ha sido encontrado con vida desde el sábado pasado.
Una marcha pacífica se realizará más adelante en el día en la ciudad de Brumadinho, en donde colapsó la presa.
