Revista Cambio

Dio positivo en COVID19 el gobernador de Tamaulipas; Francisco García

El gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, dio a conocer que dio positivo a la prueba del COVID-19, por lo que empezó un periodo de cuarentena en su casa, desde donde dijo, seguirá trabajando.

La mañana de este jueves, el mandatario estatal hizo este anuncio a través de su cuenta de Twitter, donde añadió que se encuentra en contacto con las dependencias tamaulipecas de salud, seguridad y del giro económico y social, para no parar sus labores para hacer de la pandemia.

Además agregó que Tamaulipas ahora mismo está pasando por un momento crítico de contagios del nuevo coronavirus.

 

En Tamaulipas, hasta este jueves, se reportan 6,041 contagios del nuevo coronavirus y 373 fallecidos.

Ante ese panorama, el gobernador García Cabeza de Vaca alertó la víspera sobre lo que consideró un acelerado crecimiento de los casos de COVID-19 en varios municipios del estado. “¡Actuamos con responsabilidad o nuestras instituciones de salud colapsarán!”, publicó en su cuenta de Twitter.

En el mensaje, García Cabeza de Vaca señaló que en municipios como Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros se dispararon los contagios, razón por la que “estamos muy próximos a declarar cero disponibilidad de camas y ventiladores para pacientes de Covid-19”.

“Hasta la fecha nuestro supera los 6,000 casos confirmados y más de 500 fallecimientos”, alarmó el gobernador, reiterando una cifra de muertes superior a las reportadas oficialmente (373). “Son cifras que lastiman, sin embargo, lo que en este momento más nos preocupa, es la tendencia a incrementarse”.

Francisco García también indicó que si las cosas siguen con este ritmo, los hospitales públicos y privados habilitados para pacientes COVID-19 innevitablemente se verán saturados y tendrán que recurrir a improvisar “campamentos para recibir a las personas contagiadas, con los riesgos que ello implica”.

Por otro lado, destacó los esfuerzos que se han hecho en ese estado en materia de prevención, como la construcción de los 8 hospitales covid equipados, las medidas de confinamiento, los filtros sanitarios, y la suspensión de actividades no esenciales, entre otros.

No obstante, también lamentó que la sociedad tamaulipeca se ha relajado y eso ha generado el incremento exponencial de los contactos y por ende el nivel de contagio. “Me duele decirlo, no todos los tamaulipecos están actuando con responsabilidad y ponen en peligro, tanto su vida, como la de sus familias y seres más cercanos”. Continuó reprochando que mientras las personas responsables extreman precauciones y solamente salen de sus casas por motivos altamente justificados, algunas otras siguen celebrando fiestas y reuniones, incrementando la movilidad en la vía pública, poniendo en riesgo sus vidas y las de los demás.

“Esta es una llamada a la vida. O todos actuamos hoy de manera solidaria y responsable, o pronto nos enfrentaremos a la crisis de salud más severa que quizá haya padecido Tamaulipas en su historia”, enfatizó Francisco García cabeza de Vaca en su videomensaje.

Por otro lado, hace unas semanas, el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) en Tamaulipas, propuso una serie de acciones para evitar que se presente la falta de productos de primera necesidad e insumos médicos a causa de compras de pánico o acaparamiento de las personas, tomando en cuenta que la pandemia en México podría alargarse hasta octubre.

El grupo panista propuso ante el congreso local una serie de adiciones al Código Penal del Estado que establecerían como delito dichos comportamientos, entre los que destacan el capítulo VII, “Delitos contra la Economía del Estado” y los artículos 157 quinquies y 157 sexties.

El diputado Gerardo Peña Flores presentó la propuesta afirmando que es “necesario que instrumentemos las acciones necesarias para proteger los intereses y la economía de nuestras y nuestros representados; como en la presente, donde se propone tipificar las conductas de acaparamiento, ocultación o injustificada negativa de la venta de productos de consumo básico o generalizado, la limitación de la producción o el manejo que se haga de tales productos y la suspensión de la producción, procesamiento, distribución, oferta o venta de mercancías de la prestación de servicios que efectúen los industriales, comerciantes, productores, empresarios o prestadores de servicios, con el objeto de obtener un alza en los precios o se afecte el abasto de los consumidores”.