En el mundo del deporte, las principales competiciones profesionales del mundo buscan tener su espacio, en cuanto a audiencia y marcas publicitarias. En un mundo tan globalizado como el de hoy, es difícil repartir el pastel económico en igualdad de condiciones, por ello, es necesario que cada organización de este tipo acometa planes de restructuración económicos y deportivos, para poder seguir progresando e incrementando los datos que desprenden en todos los niveles.
La NBA es una auténtica referencia de competición deportiva que goza de muy buena salud a nivel planetario. Pero en el deporte como en la vida, nada llega por casualidad. Esa internacionalización de la liga tiene su explicación en la gran igualdad y competitividad que ofrece el torneo cada temporada. Para que esto sea posible, es necesario adaptar las medidas económicas para disminuir la brecha existente entre las franquicias con mas posibilidades dinerarias y las que tienen menos. Por eso, el salary cap y el salary floor son los dos pilares que han permitido ese aumento de la competitividad en la liga y su constante renovación.
La evolución de este techo y suelo de gasto que tienen las franquicias para confeccionar sus plantillas, se puede contemplar en un exhaustivo estudio de la casa de apuestas en línea Betway, y como ese crecimiento se ha plasmado en la difusión y el aumento de candidatos al anillo, en la mejor liga de baloncesto del mundo.
En la temporada 84-85 fue cuando el comisionado introdujo en el reglamento estas dos medidas económicas, que tan buenos resultados han ofrecido. Por aquel entonces, el salary cap se marcó en 3,6 millones de dólares, sufriendo incrementos cada año de 1-2 millones de dólares hasta llegar a nuestros días. Esta temporada se sitúa en 109 millones, y esa cifra es previsible que no se quede ahí, y siga aumentado progresivamente en los próximos años.
Igual ocurre con el suelo de gasto, ya que es un indicador vital para que las franquicias gasten, al menos, la cifra marcada en ese parámetro en su plantilla. Esto obliga a que muchos general managers deban invertir más dinero en su equipo, para no perder competitividad y cumplir con la disciplina económica de la NBA.
