Armando Sunny García Aguilar, profesor y especialista del Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas (CICBA) de la Universidad Autónoma del Estado de México, lleva a cabo estudios sobre especies importantes en el Nevado de Toluca, entre ellas, una salamandra que sólo se encuentra en esta región y el conejo de los volcanes.
La investigación comprende estudios de genética de poblaciones y paisaje con especies, generalmente microendémicas o endémicas en paisajes fragmentados o con perturbación antropogénica.
El investigador universitario refirió que el caso de la salamandra que sólo se encuentra en esta zona es muy relevante, puesto que no hay suficientes estudios sobre esta especie, que vive en las cortezas de los árboles, por lo que la tala inmoderada está acabando con su hábitat.
García Aguilar manifestó que hasta el momento, se han ubicado diversas poblaciones en comunidades como Raíces -donde se creía que era el único sitio donde habitaban-, pero también en casi todo el Nevado de Toluca.
Señaló que aún se está a tiempo de generar estrategias y evitar que disminuya el número de individuos, por lo que el CICBA trabaja para generar más información sobre la especie, pero también se enfoca en desarrollar mejores prácticas de manejo, como invitar a la población a que no retire todos los troncos para que esta salamandra pueda vivir.
Destacó que esta especie tiene importancia ecológica, pues es controladora de otras especies, entre ellas, el descortezador, que afecta a los árboles de la zona, además de varias especies de alacranes, entre otras.
Sobre el conejo de los volcanes, teporingo o zacatuche comentó que se trata de una especie que está en peligro de extinción; incluso, dijo, se llegó a pensar que ya no habitaba el Nevado de Toluca, por lo que se inició esta investigación, con el objetivo de recabar información básica y comenzar a generar estrategias de conservación de la especie.
Sin embargo, expuso Armando Sunny García Aguilar, el aumento de la población, la mancha urbana, la fragmentación de los hábitats, la cacería y la introducción de especie son aspectos que agravan la situación de las especies antes mencionadas, por lo que es importante seguir investigando en el Nevado de Toluca, pero también en las otras montañas del Estado de México.